Con cerca de 50 000 hectáreas, surcadas por canales hasta donde alcanza la vista, la Grande Brière es uno de los humedales más grandes de Francia. Saint-Nazaire no está situado en el corazón de la Brière, pero las marismas y los canales forman parte del municipio, en su parte nordeste. Las marismas y el boscaje cubren casi la mitad del territorio municipal.
La segunda marisma más grande de Francia
¿Qué puede decirse de la Brière? Que es la segunda marisma más grande de Francia, un conjunto excepcional de hábitats naturales y humedales en los que se han identificado 900 plantas diferentes, en los que se refugian miles de aves acuáticas para hibernar, en los que se puede escuchar el canto el ruiseñor pechiazul y observar las garzas, garcetas y patos… ¡sí, todo eso y mucho más!
Pero también… la sensación de encontrarse en el «fin del mundo», en un paisaje con un horizonte infinito marcado aquí por un campanario, y allá, a lo lejos, por el puente de Saint-Nazaire. ¡Y la tranquilidad! Solo el viento entre los juncos para acompañar el silencio.
La tierra, el agua, el horizonte infinito, el susurro de los juncos, el vuelo de una garza…
Descubra algunas de las puertas de acceso para comprender mejor la Brière.
Rozé: inmersión en Brière en Saint-Malo-de-Guersac
En el centro del Parque Natural Regional de Brière, el puerto de Rozé ofrece una nueva puerta de entrada para descubrir una naturaleza excepcional. ¡Aviso a los que buscan sensaciones suaves y turismo verde!
- El mirador: desde lo alto de sus 24 metros, este observatorio ofrece unas vistas excepcionales de las marismas de Brière.
- Paseos en chalana: punto de partida de paseos para descubrir la marisma a bordo de esta embarcación tradicional de Brière.
- Reserva Natural Pierre Constant: le esperan varios puestos de observación ornitológica para acercarse a la naturaleza y a las aves.
- Carril bici de Saint-Nazaire<>La Chapelle-des-Marais (vía Saint-Joachim y Rozé): siguiendo el trazado de la antigua vía de ferrocarril de Saint-Nazaire a Herbignac, transformada en vía verde, se descubren poco a poco las marismas de Brière.
Reserva Natural Regional Pierre Constant
Puede aparcar fácilmente en la esclusa de Rozé. Al otro lado del pequeño puente de piedra se encuentra la marisma: a su derecha un canal, a su izquierda las praderas naturales inundables… El sendero que recorre el canal a lo largo de unos 800 metros conduce directamente a la reserva Pierre Constant, una primera inmersión en la Grande Brière, el silencio, los extensos horizontes. Dependiendo de la temporada, y también de la hora del día, se pueden observar patos y gansos, garzas y espátulas blancas, lavanderas, pechiazules, hortelanos de la marisma… No dude en pedirnos unos prismáticos en la recepción, se los prestaremos para su visita a la reserva.
Información práctica:
– Rozé (Saint-Malo-de-Guersac)
– la entrada es gratuita
– en verano se ofrecen visitas guiadas de pago
– no se admiten perros
La Maison de la Mariée (Casa de la Novia)
En la isla de Fédrun, esta pequeña cabaña le sumerge en el mundo de las bodas del siglo XIX y de las primeras décadas del siglo XX. Descubra los talleres de fabricación de flores de cera de Saint-Joachim y los sorprendentes y magníficos globos de novia.
Ofrecidos en el momento de la boda, destinados principalmente a preservar y proteger la corona de la novia, estos globos de vidrio se convierten en verdaderos escaparates de los recuerdos de la familia.
Información práctica:
– 182 rue du Pouët en la isla de Fédrun (Saint-Joachim)
– en verano se ofrecen visitas guiadas de pago
– más información en la página web de la Casa de la Novia
– reservas en la Maison du Parc llamando al +33 (0)2 40 66 85 01
La Chaumière briéronne (Cabaña de la Brière)
Un viaje en el tiempo le espera en esta cabaña rural para visitar un interior tradicional de la Brière, tal como sería alrededor de 1900… Muebles, herramientas… todo está fielmente recreado en una estancia única. Luego hay que subir a la planta superior, que resulta doblemente interesante, porque puede verse, olerse y tocarse el interior del techo de paja y porque puede asistirse a la proyección de la película Brière et Briérons (1947).
Información práctica:
– 207, rue du chef de l’île en la isla de Fédrun (Saint-Joachim)
– en verano se ofrecen visitas guiadas de pago
– información y reservas en la Maison du Parc llamando al +33 (0)2 40 66 85 01
El Musée de la Marine en bois del Brivet
Este museo, creado por una asociación de apasionados, presenta la asombrosa vocación marítima de esta pequeña ciudad de la Brière: a lo largo de los siglos, muchos habitantes de Montoir fueron marineros, ya sea en cabotaje (transporte de sal, turba…) o en navegación de larga distancia. Y también eran constructores de barcos, como lo demuestran los astilleros del Brivet, este último afluente del Loira. Su maestría era célebre, y por eso casi resultó evidente que los habitantes de la Brière fuesen, a partir de la década de 1860, los primeros trabajadores de los nuevos astilleros de Saint-Nazaire. La gran historia transatlántica de Saint-Nazaire comenzó… ¡en la Brière!
Información práctica:
– Espacio Chateaubriand en Montoir-de-Bretagne
– información y reservas en la Maison du Parc llamando al +33 (0) 2 40 45 58 22
El agua está por todas partes, y el canal chapotea suavemente bajo la barcaza.
Porque no debe dejar de explorar la marisma con este tradicional barco de fondo plano que era el medio de transporte diario de los Briérons. Un paisaje natural excepcional modelado por la mano del hombre (pero no, no es una contradicción), la Brière es una invitación a disfrutar del privilegio del silencio, de la lentitud, de la contemplación.
¡Bienvenido/a a otro mundo!
La Brière, parque natural, tierra con carácter y excepcional, es un territorio fértil y creativo que favorece el arte y la artesanía. Sí, en Brière nos gusta hacer cosas con las manos: fabricamos, damos forma, pulimos, amasamos, cortamos… Utilizando métodos ancestrales, perpetuamos las tradiciones, a veces aportando un toque de modernidad.
Para empezar, está la «morta». Los artesanos trabajan esta madera de roble fosilizada, preciosa, dura y negra como el ébano, para realizar piezas únicas, cuchillos, joyas o esculturas. La paja también es un elemento imprescindible en Brière: en el Parque Natural hay unas 3.000 cabañas. Algunos artesanos techadores siguen practicando su arte. En cuanto a las especialidades locales, no se pierda la «langouille»: una preparación a base de lengua de cerdo en forma de hermoso salchichón. Ideal para acompañar sus pícnics y aperitivos.